La forma de las flores es el carácter más destacado del género Serapias. En ellas, los tépalos externos están conniventes con los 2 tépalos superiores internos
formando una especie de casco llamado gálea, que cubre al tercer tépalo
interno, o labelo. Este queda dividido en dos partes por un estrangulamiento: el
hipoquilo, que queda bajo el casco, y el epiquilo.
Tienen entre 2 y 5 tubérculos ovoideos, y hojas lanceoladas. Las serapias carecen de néctar y tienen variadas formas de atraer a los insectos para su polinización. Por ejemplo ofrecer cobijo a algunas abejas dentro de su flor en los días de lluvia.
En Asturias se pueden encontrar tres especies, que se diferencian por el colorido de la flor y la forma del labelo. Crecen en prados y lugares abiertos.
La más frecuente es Serapias lingua, que tiene el labelo de 15-25 mm de longitud, con el hipoquilo plano y bilobulado y el epiquilo rojo-violáceo, colgante, a modo de lengua, lo que da el nombre a la especie. Tiene una sola callosidad en la base, de un purpura oscuro.
Tiene una talla media, y normalmente no sobrepasa los 20 cm de altura, aunque puede llegar a 35 cm, con una inflorescencia alargada y laxa. Las flores, de 2 a 6 por inflorescencia, tienen un tono por lo general púrpura violaceo, sin pelos y con los nervios de color púrpura más intenso. Se encuentra desde la costa a los 1000 m, y florece entre abril y julio.
Por su parte, la más pequeña y escasa, como por otro lado indica su nombre, es Serapias parviflora. En ella el labelo es pequeño, de 6-10 mm de longitud, y está frecuentemente dirigido hacia atrás (una característica de la especie), adosado bajo el hipoquilo.
Esta especie presenta una fuerte hipocromía, con las flores muy pálidas. Es pequeña, y no suele superar los 20 cm. A diferencia de la anterior presenta dos callosidades en la base del hipoquilo. En Asturias está muy restringida a la franja litoral, y florece entre mayo y junio.
Por su parte, en Serapias cordigera las flores son grandes, de color granate o rojo vinoso, a menudo bastante oscuro. Al estar ensanchadas en el centro reciben también el nombre de serapias acorazonada. A diferencia de las anteriores es bastante vellosa.
Alcanza los 600 m de altitud y florece entre abril y junio.
Las plantas del género Serapias hibridan con facilidad allí donde comparten hábitat, y con el tiempo los híbridos llegan a ser más frecuentes que los parentales. Esto, unido a su gran variabilidad, hace que en ocasiones hace que sean difíciles de clasificar. Por ejemplo, la siguiente foto es de un ejemplar de Serapias x ambigua, híbrido de Serapias lingua y Serapias cordigera.
Presenta la forma de Serapias lingua y el color de S. cordigera, y se localizó en un prado donde crecían ambos parentales. Aquí se ven en primer plano, y al fondo un buen grupo de S. lingua.
Las fotos de las tres especies están realizadas en distintos lugares del concejo de Gozón, en Asturias, entre abril y mayo.
Este año aún no las he visto, ¿ será que miro solo al cielo?..
ResponderEliminarGracias por tu artículo. Me has ayudado a identificar las que yo he encontrado este año en el parque de mi pueblo, gracias a que nadie a cortado el cesped por el Estado de Alarma. Son Serapias Lingua y nunca antes las habíamos visto ahí. Ojalá las dejasen crecer todos los años
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